jueves, 27 de mayo de 2010

EL GRITO SILENCIOSO por RAYEN TUTELU


El Martes 25 a las 22:44

Quizás porque no soy buen poeta, mis palabras sean solo letras que dibujen el papel.
Quizás porque no soy un gran artista, no pueda ver tu rostro como algo más que una simple figura.
Quizás porque no soy de la nobleza, no tiño mis sueños con lujos de cristal. (Al fin y al cabo no compran mi felicidad)
Quizás porque soy un mal negociante pierdo el placer de sentirte, por buscarte en mis ojos.
Quizás porque no soy un buen soldado tus locuras me ametrallen, sin lugar a reprimir.
Quizás porque no soy nada de eso que buscás, llegue a ser todo lo que tu alma está tratando de encontrar. Y desespera.
Pero en verdad.. hay un trozo de papel que no está escrito. Y el hoy, es una imagen que ya no muestra nada. En ese papel decido plasmar otra realidad.
Bienvenido Peñi Namún.
Voy a hablarte de hechos que transcurren, ahí en tu subconsciente. Anhelos de presencias que hace rato que están con vos. Le das paso al miedo, y alimentás la incertidumbre. Si supieras que soñar da vida..
Para qué esperar que un sufrido monólogo nos regale retazos de glorias que no hemos de pelear? Por qué pensar en lo simple, servido en bandeja, sin luchas, ni llantos en el rincón?
Quizás porque sos buen caminante sabés que las piedras no generan tropiezos. Son peqeñas compañías, de ese camino por transitar.
Quizás porque no oíste del odio, tu corazón es puro y noble. Y como leí en algún renglón: sos amor. Y mucho más.
Quizás porque también sos luz, no te apaga ni la noche. Y las sombras del mal tiempo no te hacen aflojar.
Quizás porque el silencio no es partido de tu ciencia, el werkén que llevás dentro nunca se va a callar.
Quizás porque la falta de una sonrisa amarga el día más dulce, te regalo mil sonrisas, para verte siempre alegre.
Podría decir que lo mio es simpleza. Son ganas de vestir con palabras sentimientos que abrigan estas frases que relata mi ser. De seguro la suerte que me lleva a tu encuentro la envió el grito encerrado en tu pecho. Grito que hoy cesa. Acá estoy. Sin paciencia para la inseguridad. Con ventanas abiertas al sol y a todo lo que quieras imaginar.
Asique corré como el kona en busca de paz. Sin parar. Hacia vos mismo.

No hay comentarios: